Cuando Licanrayén, una joven mapuche, iba a casarse con Quitralpique, sucedió algo inesperado. Pillán hizo que la tierra temblara, que brotara lava y provocó inundaciones. Para calmar al espíritu del Pillán había que entregarle a Licanrayén.
Taharoa era un pequeño niño que vivía en una isla triangular alejada de todo continente, llamada por algunos Rapa Nui. Le gustaba trepar las rocas y recorrer la costa recolectando tesoros y regalos del mar. Una tarde en que soplaba el cálido viento del norte, Taharoa bajó a la playa, y atrapó con una boya […]